A continuación te enseñaré la receta para macerar frutas deshidratadas que puedes usar en una gran cantidad de postres, ejemplo el Bizcocho de Navidad. Consiste en sumergir dichas frutas en un líquido, preferiblemente con alcohol, y en un ingrediente endulzante.

En esta oportunidad sumergiremos las frutas en licor (puede ser Ron, Whisky o Vino) y en melaza de caña o miel. Deja que los sabores se mezclen durante 8-10 días antes de usarlas. Mientras más tiempo pasen macerando, mejor quedarán. Inclusive hay muchas personas que maceran frutas durante meses antes de utilizarlas.

¡Espero les guste!

Ingredientes

• 300 gramos de fruta deshidratada en trozos pequeños (pasas, dátiles, orejones de albaricoque, piña, papaya, cerezas, arándanos, o cualquiera otra de tu preferencia).
• ½ taza de melaza de caña.
• ¼ taza de Ron o Whisky.
• Opcional: palo de canela para aportar sabor.

Preparación

Paso 1:

Trocea las frutas deshidratadas del tamaño deseado. Esto puede variar si las quieres para decorar un postre o si, por el contrario, las quieres mezclar en la masa de un bizcocho o pan. Mientras más pequeñas, más rápido absorberán los sabores del licor, la melaza y las demás frutas. Así que también debes tomar esto en cuenta. Si las necesitas para usarlas en pocos días, es preferible que las cortes en trozos pequeños.

Paso 2:

Coloca en un envase grande las frutas troceadas, la melaza de caña y el licor. Mezcla muy bien todos los ingredientes hasta que queden bien integrados unos con otros.

Paso 3:

Guarda las frutas mezcladas en un envase de vidrio de 8 a 10 días antes de utilizarlas. Esto permitirá que se concentren los sabores. Es importante que las frutas tengan líquido. Si ves que no están lo suficientemente empapadas, te sugiero agregar más liquido hasta cubrirlas.

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